¿Cómo enseñarle a tu perro a cerrar una puerta?
¿Te gusta enseñarle a tu perro nuevos trucos y te gustaría enseñarle a cerrar una puerta? Averigua cómo enseñarle este truco.
¿Por qué enseñar a tu perro a cerrar una puerta?
En general, a un perro le gusta aprender nuevos trucos. El tiempo que pasan juntos lo divierte y desarrolla la complicidad que comparten. ¡Es como un juego para él!
Más allá de esta simple distracción, algunos trucos pueden ser prácticos en la vida cotidiana! Y saber cómo cerrar una puerta es una de ellas. Digamos que tienes los brazos llenos: ¡estarás satisfecho de que tu perro pueda cerrar la puerta detrás de ti!
¿Cómo le enseñas un truco o una orden a tu perro?
Enseñar un truco a tu perro, sea lo que sea, requiere algunas nociones:
- Repetición: tres sesiones de 5 minutos son mejores que una de 15 minutos. Tu perro tiene una capacidad de concentración limitada (¡más aún si es un cachorro!): si sientes que empieza a distraerse, es mejor parar que insistir.
- Paciencia: no practiques una sesión si estás cansado o molesto. El perro es una verdadera esponja: puede sentir tu nerviosismo y estar estresado también.
- ¡Positividad! ¡Anima a tu perro! Aprender trucos es también un momento para jugar y divertirse. Tu perro necesita sentir esta energía, lo motivará y hará que el aprendizaje sea más rápido.
- Golosinas: No todos los perros tienen el mismo apetito, a algunos les gusta el pienso pequeño, otros el jamón… ¡encuentre la golosina que le interese a tu perro lo suficiente para que tenga éxito en sus trucos!
El método para enseñar a tu perro a cerrar una puerta
Ahora averigüemos cómo enseñar a un perro a cerrar una puerta.
Prerrequisito
Antes de empezar a enseñar a tu perro, es simplemente necesario que sepa su nombre de pila y cómo sentarse. Estos son dos conceptos que ya debe conocer para facilitar este proceso de aprendizaje.
Paso uno
El primer paso es enseñar a tu perro a cerrar una puerta pequeña – no tiene sentido revisarlo desde el principio con una puerta que es demasiado pesada para él!
Por ejemplo, empieza con la puerta de un armario en tu cocina o baño. Abra la puerta y haz que tu perro se siente a unos centímetros de ella. Coge una golosina en tu mano y haz que cierre la puerta sin querer con el hocico atrayendole con el olor. Cuando esto ocurra, di la orden «XX, cierra la puerta» o «XX, cierra» y recompensale.
Repita la operación varias veces. Cada vez, abre la puerta y haz que tu perro se siente. Necesita asociar el orden con el gesto. Poco a poco, se puede abrir la puerta más y más y quitar la golosina, reemplazándola con estímulos. Tu perro debe entender rápidamente que tiene que cerrar la puerta para recibir tus elogios y un premio.
Paso dos
Una vez que parezca que tu perro haya adquirido este automatismo, ve al siguiente paso: hazle cerrar una gran puerta. Para hacerlo, usa una puerta de tu casa, no muy pesada.
Sigue los mismos pasos que arriba:
- Haz que tu perro se siente y cierre la puerta sin querer.
- Abre cada vez más la puerta
- Retira gradualmente las golosinas
Tercer paso
Dependiendo del tamaño y la fuerza de tu perro, puedes finalmente enseñarle a dar un portazo. De nuevo, tendrás que usar los mismos trucos.
Pero ten cuidado con este último paso: dependiendo del peso de tu puerta, no todos los tamaños de perro podrán hacerlo 🙂
Como todo entrenamiento de perros, aprender a cerrar una puerta a tu perro requiere paciencia, repetición y golosinas.
¿Entonces? ¿Estás listo para empezar?
Apasionada de los perros desde siempre, adopté a mi perra de una protectora hace 4 años. Gracias a ella, he aprendido muchas cosas: la alimentación más adecuada, la educación, la acogida de un perro… ¡Multiplico los descubrimientos y los comparto con vosotros!