¿Qué hay que tener en cuenta al volar con tu perro?

viajar con perro en avion

Hay una serie de normas que debes tener en cuenta si quieres viajar en avión con tu perro. Los requisitos pueden variar mucho según el destino y la compañía aérea, así que es aconsejable informarse con antelación.

Llevar al perro en la bodega de carga

Dependiendo de la aerolínea, hay dos opciones para llevar a tu perro en la bodega de carga. A veces puedes llevarlo al mostrador de facturación para que lo transporten como a la bodega, pero otras hay un departamento de entrega especial en el aeropuerto.

Para todas las compañías aéreas se necesita un certificado sanitario del veterinario donde figuran todas las vacunas que tu perro ha recibido y un documento que debe obtenerse un máximo de 10 días antes de la salida.

También será necesario presentar en la aduana el permiso sanitario de exportación.

Mascotas en la cabina

En algunos casos, también puedes llevar a tu perro en el propio avión. Este debe caber debajo del asiento
de enfrente, lo cual solo suele ser posible para las razas pequeñas.

El animal debe estar en un transportín bien ventilado y se recomienda planificar el viaje con al menos 14 días de antelación, ya que solo hay un número limitado de plazas para mascotas en el avión. El peso máximo permitido del animal dependerá de la aerolínea con la que se viaje.

Razas de perros que pueden ir en avión

La mayoría de las compañías aéreas no aceptan perros de guardia o protección en la bodega de
equipaje. Hay varias categorías, que pueden variar según la compañía aérea. En general, la categoría 1 incluye a los perros como los bull terrier, los pitbulls o los mastines.

Algunas compañías aéreas también tienen una segunda categoría, que incluye las razas de la categoría 1 con pedigrí además de los rottweilers o los dogos argentinos. Así pues, antes de comprar los billetes, es importante comprobar con la aerolínea si a la raza de tu perro se le permite viajar en avión a fin de evitar problemas de última hora.

Del mismo modo, hay países que no aceptan la entrada de ciertas razas, por lo que por más que la compañía aérea no presente ningún problema al respecto, se debe comprobar también las reglas aplicables a destino.

También es importante tener en cuenta que los perros de nariz plana (como los boston terrier, los chow-chow, los bóxers, los pugs, los bulldog franceses e ingleses, los shih tzus, etc.) pueden tener dificultades para respirar durante los vuelos debido al poco aire, las altas temperaturas y el estrés.

Por esta razón, algunas compañías aéreas solo aceptan estas razas en la cabina y no en la bodega de equipaje.

Documentos necesarios para perros y dueños

Para que tu perro pueda volar, además de tener las vacunas en día (en especial, la de la rabia) y llevar un
certificado veterinario que lo acredite, el animal debe llevar un microchip.

Al tener que hacer estos trámites con antelación, es importante planear el viaje y las citas necesarias de forma acorde. Asimismo, los requisitos de entrada de mascota, pueden variar de un país a otro, por lo que probablemente deban hacerse gestiones extra.

Destinos como Australia, por ejemplo, tienen normas diferentes para viajar con mascotas. La emisión del certificado veterinario debe hacerse como máximo 5 días antes del viaje, se debe solicitar un permiso de importación de perros y se debe desparasitar el perro internamente y externamente antes del viaje (14 días y 21 días respectivamente).

Asimismo, el perro deberá permanecer en cuarentena durante 10 días tras la llegada para proteger la flora y la fauna locales.

Además de estos trámites necesarios para nuestros compañeros de cuatro patas, sus dueños también
deben tramitar algunos documentos para viajar a ciertos destinos. Siguiendo el ejemplo anterior, todo
viajero necesita un visado para entrar en Australia.

Aunque hay diferentes visados para entrar en Australia, las variantes más utilizadas son el eVisitor y la ETA, cuya principal diferencia se encuentra en la nacionalidad con la que estas autorizaciones se pueden solicitar.

Ambos visados permiten viajes a Australia durante un año con una permanencia máxima
por visita de hasta 3 meses.

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